Erase una vez...

...una pareja bien avenida, buenos amigos míos, que un buen día me transmitieron la buena nueva: su resolución a consagrarse al sacramento del matrimonio:

...Y claro, ante todo tienen todo mi afecto, mi apoyo y mi respeto. Espero que no les importe la broma, saben que esto es muy serio para nosotros, sus amigos, que les aplaudiremos al salir del recinto nupcial. Claro que, esto no es Venecia... y ellos saben que en algún momento habrá arroz.
Suerte y Enhorabuena.